"We are the gods of our own universes, aren't we? Destructive ones."
Cada década, los seis jóvenes magos más brillantes y hábiles del mundo son convocados para estudiar en una academia, donde a lo largo de un año tendrán que probar su valor para ser admitidos en una sociedad de élite. Sólo cinco de ellos serán los finalistas: el poder y el prestigio está garantizado para aquellos que logren asegurar una plaza en esta academia, que contiene todo el conocimiento (in)imaginable del mundo. ¿Qué tan lejos estás dispuesto a llegar por cumplir tus ambiciones?
Claramente, este libro pertenece al subgénero de la dark academia. Tenemos la ambientación, ya que la historia se desarrolla en entornos académicos, rodeados de libros y bibliotecas, lúgubres y remotos. También la vestimenta de los personajes encaja con esta estética: entre faldas, medias y camisas, a medio camino entre académicas y elegantes. Pero más que los detalles visibles, es el comportamiento/ética de los personajes: tienen una moralidad gris, que suele caracterizar a los personajes de estas historias. Y es que la academia, las constantes investigaciones y cuestionamientos inevitablemente suelen llevar a reconsiderar todos los fundamentos que damos por sentado, los cuales incluyen los éticos y morales.
En cuanto a personalidades, si bien tenemos el molde de los personajes de dark academia -snobs, pretenciosos, narcisistas-, encontramos matices entre ellos. No hay dos personajes idénticos, las motivaciones que llevaron a cada uno a aceptar su lugar para concursar por la pertenencia a esta sociedad están bien diferenciadas. Y aunque haya puntos de convergencia, también están las marcadas diferencias entre ellos. Desde aquellos con los que sabes que es mejor mantener distancias, con los que logras identificarte/conectar, los que están a la deriva y los que no soportas. A pesar de las diferencias, todos comparten algo en común: el anhelo de ser aceptados en esta sociedad. La divergencia radica en qué están dispuestos a hacer para garantizar su lugar. Bien dice el libro:
"La moraleja de la historia:
Cuidado con el hombre que se enfrenta a ti sin armas.
Si a sus ojos no eres tú el objetivo,
puede estar seguro de que entonces eres el arma."
Ya sé que suena grandilocuente, pero ciertamente la ambición está presente en cada personaje. Y varios de ellos no pensarán dos veces en lo que están dispuestos a hacer para cumplir sus más preciados anhelos.
Disfruto enormemente del género dark academia y me da mucho gusto encontrarme en el camino con esta historia, que no solo le aporta otros enfoques que la enriquecen, como es la fantasía. También reivindica el subgénero o señala detalles importantes con los que debemos mantenernos críticos, como que estas historias suelen ser desarrolladas en ambientes privilegiados -aka la academia, que reconozcamos es elitista- y cuestionar porqué se da por sentado que el conocimiento solo pertenece a un selecto grupo. Recordemos que la educación desafortunadamente se sigue encontrando más en el espectro de privilegio que de derecho básico. Y aunque entiendo que la investigación y la academia requieren de financiación, constantemente siguen reproduciendo esquemas que la cierran a círculos selectos, en vez de abrirse y acercarse al público general.
Sobre el tono fantástico del libro, me encantó. En esta academia estudian a lo largo de un año todas las posibilidades que tiene la magia en la realidad -como lo es el espacio, tiempo, pensamiento, intención-. Aunque no las exploran a profundidad como me hubiera encantado leer, especialmente la relativa al tiempo, creo que lo hizo en la justa medida. No me malentiendan, el world building me pareció fantástico y sí logró sumergirme en este nuevo mundo que combina ciencia, tecnología y magia a partes iguales, de forma natural. Mas bien a lo largo del libro se debaten los alcances, las posibilidades de la magia. Y verlo de esa forma teórica, a través de discusiones y estudios, me encantó. Además, tengo la sensación de que si no explotó por completo este mundo, es porque la autora tiene dos libros más por delante donde lo hará.
Reconozco que el ritmo del libro va algo lento y al inicio pareciera prometer demasiada acción, la cual tarda en llegar y de formas inesperadas. Aunque el supuesto gran descubrimento se ve que es parte fundamental de esta primera parte, ciertamente no sorprende al lector. No sé si será algo propio de las historias de dark academia, pero no me molestó el lento desarrollo de la historia, las largas escenas contemplativas con diálogos demasiados cuidados y precisos. Yo gocé muchísimo leyendo la narrativa de Olivie. Mi mejor consejo para acercarse a esta historia: ténganle paciencia y déjense llevar. Si lo hacen, serán gratamente sorprendidos.
Fun fact: tuve la fortuna de asistir a una presentación del libro en la FIL Guadalajara y le pregunté a la autora qué le inspiró a escribir una historia de dark academia. Ella comentó que quería escribir una especie de continuación a "The Secret History" de Donna Tartt pero con magia -libro que amo con la pasión de mil soles y que es el fundador de este subgénero.